Laura, recuerdo el día que te conocí, en la terraza de vuestra casa de Madrid. Yo estaba hablando con Alfredo y de repente llegaste, me quedé impactada porque vi un doble, wow! Erais iguales, recuerdo mucho cuando en Llansá nos bajábamos las dos a la playa... pero sobretodo te recuerdo con esa sonrisa que iluminaba tu cara y tus preciosos ojos azules.
Has dejado algo en nosotros y eso es lo más importante.
Desde Mexico os abrazamos a los tres.
Laura, abrazos infinitos para ti!